Myanmar – primeras 48 hs en Yangon

BIENVENIDO NUEVAMENTE AL SUDESTE ASIÁTICO!.

Mingalabar Myanmar!!. 

Dicen que las primeras impresiones son las que perduran, y espero que en este caso Myanmar me acabe dejando tan apasionado como lo estoy en las primeras 48 hs desde mi llegada!. Bueno, la verdad que ya a las 24 hs estaba con ganas de escribir esto mismo, pero hay veces que no tengo ganas de sentarme a hacerlo!. Pero lo pienso, y se los transmito con mi mente!. 

Muchas personas me habían comentado de que Myanmar es un país espectacular y con un pueblo encantador, aún pobre y en vías de desarrollo, mira de los ambiciosos inversores internacionales que reclaman mayor estabilidad para lucrar con sus fortunas. Los medios de comunicación también informan de las revueltas civiles, de los problemas políticos, de los derechos humanos, del no tan antiguo boicot del turismo por parte de las grandes potencias, del devastador tsunami del 2008, entre otras cosas. Así que decidí dejar de lado todas las externalidades, y venir a descubrirlo por mi mismo!. 

El calor y el sudor constante que había olvidado hace algunos meses volvió a abrazarme y decirme ¨bienvenido nuevamente al sudeste asiático¨!. Ropa pegada, pasión por el aire acondicionado, muuuucho protector solar, y a caminar!. Es solamente así como voy descubriendo cada sitio, y más que nada, su gente. Me he dado cuenta que cada vez más me gusta pararme y conversar con la gente, así, de la nada, y la mejor forma para conseguir el acercamiento es una gran sonrisa!. Y aquí nadie la niega, es más, la abrazan. A los bamares (la etnia mayoritaria de las ocho principales que hay en Myanmar) les encanta charlar, acercarse, mirarte, y que les dediques un tiempo para hablar de lo que sea. Siento que tienen una pasión especial por sentir que los de fuera nos interesamos por su país, y ellos aprovechar para preguntar y escuchar cualquier historia que los turistas tenemos para compartir. Y eso para quien viaja es una ayuda increible para hacernos sentir confortables y cercanos a su cultura. 

Yangon es una ciudad de más de cuatro millones de habitantes, apenas el 10% de la población total del país. No es hoy la capital, pero es la ciudad más importante conjuntamente con Mandalay en la parte central. Como Myanmar fue por muchos años una colonia inglesa, la ciudad tiene aún su sello inglés que se deja ver en mucha de su arquitectura colonial, diseño urbano, costumbres y facilidad con el inglés. Pero su personalidad la marcan las pagodas, las estupas, los Buddhas que decoran la ciudad con colores amarillos brillantes. 

 

Lectura de mano, clásico de la ciudad!

 

Todo bueno!. ¨Me caso en 2014 y tendré dos hijos!¨…

Ya en este regreso al sur de Asia, tendré que comenzar a conocer y comprender una vez más el enfoque de su religión, mayormente budista, pero de otra corriente diferente a la himalaya del norte, China y Japón. Aquí como en los siguientes países que visitaré al este y al sur, se practica el budismo Theravada, que a diferencia del Mahayana cree que es el individuo que se esfuerza por conseguir llegar al Nirvana, a la Iluminación, y no la búsqueda del mismo en pro de todos los demás seres. Bajo esta diferencia los fundamentos budistas son los mismos (sistema psico-filosófico), pero superficial y digamos folclóricamente, lo que vemos en los templos, muchos de los rituales, las imágenes y me imagino que algunas cosas más, son diferentes. Mi desafío es conocerlos, vivirlos, y sentirlos. 

Monjes del calor, hombro al aire!!

A propósito de ello, ayer visité la pagoda Shwedagon Paya, una estupa (aquí llamada zedi) dorada de tamaño descomunal, enchapada en oro y recubierta en su punto más alto por diamantes y otras piedras preciosas, que está rodeada por innumerables templos y templetes, altares y estatuas de miles de Buddhas en posturas, colores y tamaños diferentes. Para los locales, el lugar de peregrinación budista más importante de su país, al que al menos una vez en su vida todos deben acudir a rezar. Un espectáculo de colores, olores, visiones, músicas, sensaciones y vibraciones que me despertaron e hipnotizaron por más de cuatro horas. Entre los vestidos típicos de los bamares con sus coloridos ¨longyi¨ (sarong unisex que usan en lugar de los pantalones o polleras occidentales), las flores de papel que parecen origamis, los inciensos, los monjes medio destapados con hombros al descubierto, y los reflejos del atardecer y luego de la luna llena en el dorado de las estupas, quedé maravillado!. 

 

 

 

 

Me estrené en la comida burmesa sin pensarlo, ahora enfocado en lo vegetariano, y descubrí que se puede comer aún más rico y diferente de lo que había conocido. Bueno, Bhután no fue más que un picante tras otro y una serie de homogéneas comidas que sabía me llevarían a desbocarme cuando viese algo fuera del arroz y los chilis!. Me invitaron en el restaurante a hacercarme a la cocina y elegir casi que directamente de sus ollas, me llenaron de platillos con variados sabores, sopa, ensalada, y especias o combinaciones que aún no consigo describirles!. Un té con leche condensada, dosado según tres opciones, y una cerveza helada como les gusta a los brazucas. 

Vegetarian burmese!

 

Dejando de lado la lluvia diaria y los agujeros de las calles y aceras que ya me han dado una primera lección (no caminar sin mirar muy bien donde ¨meto la pata¨), Yangon y su gente me han recibido con brazos abiertos, y espero que todo su país siga siendo tan revelador como lo ha sido mi primera impresión a su principal ciudad.

 

2 comentarios en “Myanmar – primeras 48 hs en Yangon

  1. Hola queridísimo amigo !!! Que experiencia, por Dios ! Seguro este año marcara un antes y un después en tu vida ! Que bien se te siente y se ve !! Me alegro mucho y de corazón. Estoy realmente impresionada de la capacidad que has desarrollado para observar, percibir y entender todas esas realidades, tan lejanas para algunos, pero sin duda más fácil de comprender a partir de tu magnífico relato. De no creer que recién entable contacto pero te he venido siguiendo y disfrutando de tu ruta. Acá nosotros muy bien ! Aunque con un ritmo que con seguridad en este momento te parezca injustificado ! Estarás de vuelta en verano por acá ? Espero que si para disfrutar de primera mano todos esos fantásticos relatos. Beso enorme ! Cuídate ! Tqm.

    • Querida Amiga,
      Nunca tus palabras tienen desperdicio, siempre sabiduría. Sé de tu compañía silenciosa, como tb lo hacen muchos. Saberlo me hace sentir muy bien, acompañado en esta jornada solitaria, aunque jamás en soledad.
      Muchas veces me invade la pereza negativa y dejo de compartir vivencias que experimento intensamente y que me encantaría documentar. Las llevo conmigo, la proceso, y cuando quiero acordarme, ya estoy expuesto a otras nuevas, y así siempre. No acabas de elaborar una cultura que ya sin darte cuenta estás inmerso en otra, y el chip debe cambiar y ajustarse rápidamente para evitar frustración!. jaja
      El ritmo al que te refieres es el ritmo que quizás siempre hemos vivido; lo bueno es que al menos puedas darte cuenta, aún sólo diciéndolo como lo haces, de que es injustificado. Cuestionarlo es el mejor comienzo!. Darle un sentido como parte de tu vida, es ya un paso más profundo.
      Te veré pronto, besos, j.

Replica a MAria Cancelar la respuesta